La princesa DUCHILA, siguiendo con sus obligaciones de estado, gustaba de visitar a sus subditos, se mezclaba con ellos de incognito, participaba de sus vidas.
Siempre la acompañaban sus Damas de Honor: CAROLA, MARUNIA, MORAIRA, NATALECIA, AIXARIA, NAZARINA Y BERNADETTE, jamas se habia visto un ramillete semejante de bellezas.
Pronto llamo su atencion un corro de gentes y en el centro de el un patan, de manos grandes y peludas, pelo desaliñado, barba blanca,despeinada; solo llamaba la atencion sus dientes blancos y su mirada profunda.
El patan era un contador de historias; la princesa DUCHILA, se abrió paso entre las gentes, hasta llegar a primera linea, no hay que decir que el populacho, viendo a su princesa, le abrió paso, entre una mezcla de respeto y admiracion.
La Princesa quedo admirada de las historias que contaba el maldito patan ( perdon, lo de maldito vino despues);
Cada dia a la misma hora, la princesa iba a escuchar al patan.
Un dia la Princesa tuvo la osadia de invitarlo a los jardines de palacio, le dijo al Rey HUMAR, que era un jardinero experto, que le cuidaria las plantas ( o la planta, no lo se muy bien).
Pronto las visitas del jardinero se convirtieron en diarias, ella lo escuchaba ensimismada, se pasaba largas horas escuchando las historias que le contaba el jardinero.
La amistad entre la Princesa y el jardinero fue creciendo ( he dicho amistad?) no, no era amistad, era fuego en brasas.
Permanecia largas horas sentada sobre sus muslos escuchando al jardinero, que no se cansaba de hablar,ella apostillaba sus historias, la conversacion duraba hasta el anochecer.
Solo cuando se ponia el sol ella abandonada el regazo del jardinero, para asisitr a la cena que el rey HUMAR,
gustaba de ofrecer cada noche a su familia.
El jardinero abandonaba palacio dolorido; ya que para no incomodar a la princesa, apenas se movia, apenas cambiaba de posicion.
La Princesa y el patan, eran felices con sus historias, nada les hacia sospechar que todas sus acciones eran vigiladas a distancia por un alma oscura y despiadada.
Continuara.